martes, julio 31

Brevísimo relato de nuestras vacaciones

El sábado pasado nos fuimos a Cannes. Y muchos pensarán - pero qué pijos! (chetos). Y la verdad es que nada más lejos de nuestra realidad.

Mi amiga Paola que vive en Paris nos invitó a pasar una semana con su marido y su hijo en un departamentito que su suegro tiene en esa ciudad. Ibamos con el acuerdo de comer de supermercado y practicar nuestra tan querida filosofia de vida gasolera. Las 12 horas de viaje de ida se me hicieron cortísimas. Supongo que el hecho de que Álvaro dumiera casi todo el camino ayudó. Pero es que también tenia tantas ganas de volver a ver a Pao que iba como una nena preguntando cúanto faltaba a cada rato. Paola es una de mis mejores amigas y como sabran en España no he logrado hacer ningun amigo igual de bueno. Sin contar a Nerea, claro pero ella no cuenta porque se me fue a Irlanda.

Allá disfrutamos de un lugar precioso con la mejor piscina que vi en mi vida. Conocimos la ciudad y su playa. En Cannes Álvaro que iba embadurnado de FP50 se fue de jeta a la arena. Nos quedó empanado como una milanesa y estornudó arena hasta la noche. He descubierto con cierta tristeza que me he vuelto una cómodona a la que le molesta la arena que se pega en toas partes y las olas que te revuelcan y básicamente todo lo relacionado con la playa. Ahora me gusta mas la pileta. A ser posible con tumbona, sombrilla y un Antoine, instructor de natacion a quien relojear con una amiga.


Visitamos también Mougins, un pueblo que esta a muy pocos km de Cannes y donde Pablo Picasso vivió y murió. Un pueblo precioso, lleno de ateliers, pintores y verde. De callecitas estrechas con farolitos y anticuarios. Un cuento de hadas. Lástima que cuando fuimos tuvimos un problema con la tarjeta de la camara y no tengo ni una foto del lugar.

Fuimos también a Mónaco. Ya puedo decir que conocí la famosísima Mónaco, aunque haya sido de manera fugaz. Otra cosa que aprendí en este viaje es que viajar con niños y con 2 matrimonios cabreados no le hace bien al turismo. Tanto lujo, tanto yate, tanto Ferrari. Parecía otro mundo. Bueno, en realidad lo era. Y qué humedad! En fotos aparecemos todos con un halo de brillo y unos ojos de vaca que muy poco favorecedores.

Luego fuimos a Niza, que para mi gran sorpresa es playa de toscas como Playa Unión! Qué ilusión volver a sentir como se te clavan por todo el cuerpo a través de la toalla las piedras. Qué ilusión. Eso si, el agua color turquesa.


La convivencia no estuvo mal para estar en un mini piso de los de la ministra. Y a eso hay que sumarle 1 bebé, un niño de 2 ½ años, una pareja a punto de matarse, otra con problemitas y una amiga de mi amiga que paso 3 días por ahí y no sólo no puso un mango para el puchero sino que encima amagó con invitar al Hotel Carlton a tomar el café y resulto que se echó para atrás haciéndome batir mi record infusiones costosas (€10).

Volvimos el sábado 28 luego de 14 interminables horas de ruta y desde entonces ando con depresion post-vacacional. Extraño horrores a mi amiga. Me siento sola. Gris. Las cosas con S no estan yendo bien y para rematarlo, el cachetazo de cruda realidad personificado en mis suegros aparecio el mismo domingo por la mañana para recordarme lo jodida que estoy.


Si quieren otro día subo alguna foto donde aparezcamos.

A tout à l'heure!


jueves, julio 5

Princesas olvidadas o desconocidas



No saben lo bien que me vendria que alguien me regalara este libro.
A ser posible con una dedicatoria bonita.


This page is powered by Blogger. Isn't yours?